El mundo se divide en dos tipos de personas: las que ven un mueble antiguo y se les activa el restaurador que llevan dentro y las que solo ven un mueble pasado de moda. Si eres de las primeras, este post es para ti. En Bolibar Bronzes somos del primer tipo, pero entendemos que, a veces, pensar en restaurar un mueble uno mismo asusta un poco. Los materiales, las posibles enfermedades de la madera o incluso los productos que se utilizan pueden dar respeto, pero con algunos consejos y los complementos adecuados podrás convertir ese mueble que vaga por una casa antigua en un auténtico tesoro vintage. ¿Te atreves?
¿Cómo restaurar un mueble antiguo?
Antes de nada, si nunca has restaurado un mueble, te invitamos a que asistas a algún taller de iniciación o que te informes en tu ferretería de confianza sobre el proceso.
Algunos productos pueden resultar abrasivos y algunos materiales necesitan un mimo especial. Aquí encontrarás algunos consejos básicos para iniciarte en el mundo de la restauración y optaremos por un estilo vintage para darte algunos tips de decoración.
Equiparnos bien antes de empezar
Lo primero e indispensable es equiparte bien antes de empezar. Guantes, mascarilla y plásticos protectores tienen que estar los primeros en tu lista. Si tienes un espacio abierto, como una terraza o un jardín, te aconsejamos que optes por ello para el proceso. Antes de ponerte manos a la obra, proyecta cómo quieres restaurar el mueble, esto facilitará el proceso tanto de creación como de compra de materiales, pues irás directo a lo que necesitas. Si no sabes muy bien qué quieres hacer, antes de empezar busca inspiración en tiendas de antigüedades o escoge qué quieres destacar en tu mueble. Por ejemplo, si pensamos en la restauración de una cómoda con estilo vintage, puedes escoger unos tiradores o pomos y dar forma al proyecto en torno a estas piezas.
Limpiar el mueble a fondo
Si ya tienes el proyecto claro es momento de empezar. Lo primero que debes hacer es limpiar tu mueble a fondo. Casi cualquier material tolerará bien un trapo suave, agua tibia y jabón. Una vez el mueble esté limpio, es momento de revisar su estado. ¿Tiene alguna parte rota? ¿Presenta signos de carcoma? Es importante detectar los posibles defectos en esta etapa inicial para evitar tener que volver a empezar.
Fase de reparación
Una vez revisado el mueble, si fuera necesario, pasaríamos a la fase de reparación. Ten en cuenta que no se trata únicamente de arreglar lo que no esté bien, también es importante detectar partes débiles y reforzarlas. Cuando tu mueble esté a punto, pasaremos a la fase más manual. Si observas una capa de pintura vieja, es posible que desees decaparla para revelar la madera original. Asegúrate de hacerlo en un área bien ventilada y siguiendo las instrucciones del producto, protegido con guantes y mascarilla. Cuando descubras el diamante en bruto que se escondía tras la suciedad y la pintura vieja, podrás lijar la superficie si ésta presenta irregularidades y prepararla para el acabado.
Creatividad y retoques estéticos
Ahora sí, llega la parte más creativa y estética. Siguiendo la idea de proyecto que tenías en mente, es hora de aplicar la pintura o el barniz de tu elección. Ten presente el estilo de tu proyecto, por ejemplo, para un proyecto de restauración vintage, optaríamos por colores y acabados que reflejen ese estilo. Y, por último, instala los complementos. Los pomos y tiradores pueden dar un cambio absoluto a un mueble, así que tómate tu tiempo para elegir estos complementos.
Transforma tus muebles antiguos
Con unos pasos básicos puedes obtener resultados increíbles y dar una nueva vida a piezas olvidadas mientras creas una decoración única y personal en tu hogar. Recuerda que la seguridad es importante cuando se trabaja con determinados productos, así que, si tienes cualquier duda o consulta, contáctanos y te asesoramos.
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